
De Madrid, poco mas que decir que ya estoy pensando en volver. Vivir aquí, donde apenas hay de nada, e intentas levantar cualquier proyecto, y ves surgir ese sentimiento tan pueblerino de envidia y critica, de "no toquéis nuestro coto cerrado" (hablo de tema cultural, en otros ni me meto....) te hace apreciar tanto algunos lugares como la ciudad de la Gran Vía, donde nos ha acogido tan bien. Apenas han sido unos pocos días, pero el último día ya no me fui de allí como turista, me fui como quien deja atrás su hogar, con tristeza y melancolía.